El Olvidado Arte de la Compasión

El Olvidado Arte de la Compasión Solucionar las diferencias en las relaciones humanas en pareja, familia y sociedad suele ser un asunto delicado y en ocasiones devastador. Emociones como la lujuria, la ira, la avaricia y su hija predilecta la envidia, están siempre presentes en el ambiente del pensamiento contaminado y oscuro provocando graves daños y sufrimientos. Cuando el ser humano agota todo tipo de posibilidades, se da cuenta de que sus esfuerzos son inútiles y piensa que no hay posible solución, entonces es factible que entre en una seria condición emocional de angustia, desesperación, desórdenes de la personalidad y severos niveles de depresión. Una persona que está pasando por este desolador infierno emocional, debe saber que puede escapar de tan venenosa y densa circunstancia a través del cultivo de su propia sensibilidad. El ser humano es capaz de detenerse unos instantes a pensar y sentir el entorno, la problemática vital, la circunstancia de la persona que le está causado pesar y tratar de comprender su sufrimiento. La sensibilidad hacia nuestros semejantes desarrolla la fineza en la relación y el tacto necesario para no herir ni afectar a los demás con nuestras palabras o con nuestra conducta. Sensibilidad, fineza y tacto conducen necesariamente a un nivel del pensamiento más elevado: la compasión. La compasión es una fuerza, una virtud susceptible de ser desarrollada en el corazón del hombre, capaz de reflejarse en su mente y proporcionar refugio y consuelo. Trabajar intensamente en recuperar el olvidado arte de la compasión nos ayudará a alcanzar ese elevado nivel de pensamiento para salir de los bajos estratos del pensamiento oscuro y atraerá la comprensión, la serenidad y el alivio tan necesario para que la humanidad pueda elevar su pensamiento.

Dr. Carlos Cohen C.